¿Qué representa para ti Collective Academy?

Simplemente es un antes y un después en mi vida personal y profesional. Collective representa:

- Animarme a hacer cosas que no sabía que podía hacer, con más y mejores armas,

 - Conseguir un equilibrio personal que habia perdido- Mirar con otro ángulo la información que nos llega y poder tener herramientas para procesarla con valor

- Haber conocido a una comunidad que llega a ser una familia extendida.

¿Para ti cuál es el mayor valor agregado de la comunidad?

Todo, desde la comunicación, las actividades, pero por sobre todo como vamos encontrando gente con intereses similares, y podemos construir algo juntos. Lo ves a diario, desde cuando requerís una información, contacto, introducción, etc, te llega en un momento muchas respuestas que te ayudan. Como comunidad nos facilitamos la vida entre todos, crecemos y nos empujamos juntos. Otro valor adicional que se ve a diario es escuchar y debatir con diferentes puntos de vista, muchos diametralmente opuestos, pero todos muy válidos que te dan una perspectiva diferente.

¿Cómo has colaborado con otro Collective?

En lo que sea, desde hacer introducciones, hasta compartir experiencias, pasando por escuchar pero también ser escuchado. La clave es entender que como comunidad somos más fuertes que como un grupo de individuos, y cuando te das cuenta de eso, las formas de colaborar son infinitas. Finalmente recomendando la maestría a amigos y conocidos, porque cuantos más se unan, mayor es el efecto de esta red.

¿Cómo te gustaría colaborar de nuevas formas con otro Collective?

Primero conociendo a todos. La comunidad va creciendo, y saber cuáles son los intereses de cada uno nos va a permitir compartir más beneficios. 
Otra manera es generando nuevo grupos de interés y oportunidades entre nosotros, por ejemplo una vez al mes donde nos juntemos todos los que estamos en Fintech.


¿Cómo se vería tu vida hoy si no fueras Collective?

Nunca lo voy a saber plenamente, pero seguro que diferente a la que tengo hoy. Ahora mido diferente los riesgos, entiendo los puntos de vista desde otro ángulo, y sé que tengo un apoyo de una comunidad, que si necesito algo, seguro que va a responder

Nunca lo voy a saber plenamente, pero seguro que diferente a la que tengo hoy. Ahora mido diferente los riesgos, entiendo los puntos de vista desde otro ángulo, y sé que tengo un apoyo de una comunidad, que si necesito algo, seguro que va a responder

¿Qué representa para ti Collective Academy?
Para mi Collective representa ese switch on que necesitaba hacer en mi chip. El empujoncito que necesitaba para creérmela y salir a romperla. Para mi Collective representa muy bien uno de los proverbios africanos que más han marcado mi vida en los últimos 2 años: “If you want to go fast, go alone. If you want to go far, go together.” —African Proverb.
Aún después de haber acabado la maestría, el mejor apoyo que sigo encontrando para tomar decisiones importantes en mi vida, es en Collective.

¿Para ti cuál es el mayor valor agregado de la comunidad?

Dentro de la comunidad he logrado construir mi propio networking con personas que trabajan o entienden temas afines y de interés para mi. Es tan diversa, que nos permite encontrar apoyo para prácticamente cualquier tema personal y profesional. El drive que tenemos y compartimos todos por crecer, aprender y ser mejores cada día es lo más valioso que encuentro en este grupo de personas.

¿Cómo has colaborado con otro Collective?

He encontrado apoyo personal con mentores y alumnos para sobre salir de algunos malos momentos. Encontré a mi socio, para una plataforma que llevaba planeando hacer años y nada más no echaba a andar por miedo o decidia. También he fungido como tester para validación de proyectos de algunos otros miembros de la comunidad. Actualmente, como miembro del board estoy colaborando con otros ex-alumnos para lograr traer eventos de interés para la comunidad.

¿Cómo te gustaría colaborar de nuevas formas con otro Collective?

Me encantaría que en conjunto logremos extender todos los beneficios que hemos construido como comunidad a las demás personas, empezando por las más cercanas. Por ejemplo, si yo obtuve cierto valor de un mentor, extender ese beneficio a alguien más y dar ese coaching… como una cadena de favores.

¿Cómo se vería tu vida hoy si no fueras Collective?

Creo que estaría estancada, haciendo las cosas de la misma forma. Sin chispa! Sobre todo, creo que no tendría el mismo valor que tengo hoy para explotar mi propia marca personal. Hoy me siento con más estructura y más segura con las bases necesarias para manejar el 360 de mi vida (personal y profesional).

Lourdes García estudió Diseño Textil en la Universidad Iberoamericana y es generación Beta Class del Master en Negocios y Tecnología de Collective Academy. Se sumergió por 5 años en el mundo fintech donde trabajó y construyó piggo , una aplicación para GBM la Casa de Bolsa más importante en México, convirtiéndose en apasionada e impulsora de las finanzas personales . Después de un año de terminar Collective, dio un brinco al mundo de fashion y retail con Ben & Frank. Hoy está convencida que la tecnología es una gran herramienta para mejorar y empoderar la vida de las personas. Su misión es trabajar para crear una conexión entre la tecnología y el ser humano. Escribe dos columnas mensuales en el Publimetro y cuenta sus historias a través de Medium https://medium.com/@lougarciag . Encuéntrala en twitter como @LouGarciaG y en su perfil de LinkedIn https://www.linkedin.com/in/lougarc

"Yo decido quién quiero ser y qué tengo que hacer para lograrlo”
MAR 26, 2018BY MARLENECARREROIN ZETA

persona tomando acción sobre sus decisiones

El poder de la elección


En múltiples ocasiones, desde hace varios años y en diferentes ejes de mi vida, he escuchado frases como, “las personas no cambian”, “fíjate cómo es con su mamá y así será contigo”, “conoce a sus amigos y a su familia y conocerás cómo es él”, “si no dio resultados en ese puesto, no los va a dar en otro puesto”, “ni con toda la capacitación, vas a lograr que dé resultados diferentes”, entre otras.
Resulta interesante que hoy me doy cuenta que durante algunos años estos pensamientos han sido parte de mi manera de ver e interactuar en mi vida; por ejemplo, la manera en que he llegado a tomar decisiones, tanto laborales como decisiones personales. Algunas han sido con resultados exitosos, pero otras han sido con resultados que me hubieran gustado fueran diferente.
En este siglo en donde estamos a favor del cuestionamiento, estar abiertos a nuevas ideas, y ser testigos de cosas que ni siquiera imaginábamos, como es el avance tecnológico con tanta información respecto al desarrollo personal, me ha incitado a poder cuestionarme, y más, porque he tenido resultados no tan satisfactorios, ¿será que todavía siguen siendo válidos estos comentarios?, ¿estas creencias siguen siendo parte de mi vida?
Genuinamente, digamos que ya con algún conocimiento teórico y práctico, hay una frase que confieso que, sí cambió en mi mente; “las personas no cambian”. Así es, yo creo que las personas pueden cambiar; como seres humanos tenemos un poder increíble con el cual definimos el camino de nuestra vida a través de nuestras acciones; y es que contamos con el “poder de elegir”: elegir qué queremos cambiar y cómo queremos ser. Qué fácil se escucha el escribir eso ¿no?, simplemente tenemos que conocernos, trabajar en esas creencias, juicios y hábitos que, de manera inconsciente, han habitado en nuestras vidas.  Pero la respuesta nuevamente la digo, es que nosotros podemos elegir cambiar.
Rafael Echeverría, sociólogo fundador y presidente de Newfield Consulting, empresa de consultoría y formación gerencial, líder mundial en la formación de coaches empresariales, definió el modelo para la intervención del coaching ontológico llamado “OSAR”; en donde su principal apalancamiento está en conocer y entender el “OBSERVADOR” que somos. Conocer ese ser humano que a través de sus sistemas (familia, escuela, trabajo, sociedad, etc.) aprendió los hábitos, juicios, interpretaciones con los cuales le hace uno sentido a su forma de entender la vida y por lo tanto la toma de decisiones. Así que, si queremos tener un cambio profundo, lo que tenemos que hacer es ampliar la forma en cómo interpretamos el mundo, es decir, entender los juicios, los hábitos, nuestras creencias y cuestionarnos si son parte de la persona que queremos ser.
 
De años atrás, hemos escuchado hablar de muchos psicólogos que nos hablan de los modelos de cómo aprendemos; considerando alguno de ellos como Iván Pávlov y Frederic Skinner los cuales sus teorías del aprendizaje estaban enfocados al condicionamiento clásico y condicionamiento operante, en donde, en términos generales, explican cómo uno va aprendiendo ciertas conductas a través de estímulos y refuerzos. Consciente o inconscientemente, desde pequeños, esto ha sido la manera en que hemos aprendido y hemos adaptado nuestros primeros hábitos y juicios con los cuales estamos interactuando. Estas teorías con los años continúan siendo válidas, probablemente con algunos ajustes que se van haciendo las nuevas tendencias en el conocimiento.
Charles Duhigg autor del libro “The power of habit”, comentaba que el 40% de las acciones que llevamos a cabo durante nuestro día, son hábitos que realizamos de manera inconsciente. Esta es una decisión que se hace a nivel neurológico, en donde nuestro cerebro busca formas de ahorrar esfuerzos durante el día. En la mayoría de las ocasiones ni siquiera recordamos la experiencia que nos hizo crear nuestros hábitos, pero cómo vivimos de manera tan inconsciente, simplemente se vuelve parte de nuestra rutina.
 
Charles Duhigg se enfoca en un modelo nombrado de “Habit Loop” en donde te habla de tres factores que se complementan para crear el hábito: el CUEtrigger”, la RUTINA y el RECONOCIMIENTO. Es decir, los hábitos están en un ciclo, en donde tenemos un activador – trigger, éste es el que nos lleva a realizar una acción o rutina y la cual se refuerza con reconocimiento. Probablemente estos reconocimientos habitan en una emoción positiva y por lo tanto tendemos a repetirla porque nos hace sentir bien.  Lo que nos dice Charles es que podemos cambiar la acción si tenemos identificado ese reconocimiento que se nos activa, y por lo tanto poder cambiar la acción logrando un reconocimiento similar.
 
Por eso es que considero pertinente suponer que las personas pueden cambiar solo si se encuentran en un proceso profundo de entendimiento de por qué somos quien somos y de dónde viene eso que creemos que somos. “Soltar una forma habitual de ser no es fácil; es más, por lo general solemos tener razones muy elaboradas para justificarlas”, es una de las frases que escuché por ahí, y en mi opinión, allí es donde está el poder del cambio, el poder escuchar esas voces y conversaciones internas que tenemos.
Como seres humanos tenemos el poder de elegir hacer un cambio; y si no elegimos hacerlo, los resultados seguirán siendo los mismos, y por lo tanto creo que si no hacemos esto, es cuando se puede concluir que “la gente no cambia”.
Fuente: Duhigg, Charles. (2012). The power of habit : why we do what we do in life and business. New York, N.Y. :Random House : Books on Tape,
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En una charla que tuve con el director de planeación logística del corporativo una de las empresas importantes en Alemania, me contó una teoría interesante que desarrolló trabajando en México durante varios años respecto a la cultura de trabajo de nuestro país: “El problema” - me dijo - “es que en México, si naces rico, es muy difícil que dejes de serlo. Por lo tanto, ¿qué incentivo puedes tener para querer sobresalir? Y por otro lado, si naces pobre, por más que te esfuerces, es muy difícil que tengas las oportunidades para sobresalir, entonces, ¿para qué esforzarse?”
Su comentario me dejó pensando, ¿cómo llega una persona en su puesto y con su experiencia a quedarse con esa idea sobre México? Ya que no puedo decir que coincido con su punto de vista por diferentes razones y muchas excepciones de personas que he conocido.
Desde 2013 hemos hecho avances significativos en materia educativa, laboral, fiscal, en telecomunicaciones y energía con las diferentes reformas estructurales. Esto tendrá un impacto del 1.9% en el PIB para 2018 según estimaciones de la SHCP.
Ya ocupamos el lugar #8 en generación de ingenieros a nivel mundial y el #16 en ranking de universidades. En 2014 ya éramos la economía global #15 con un PIB de 1.3 trillones de dólares. Y tanto Bloomberg como The Economist estiman que podemos alcanzar los 9.8 trillones de dólares y el lugar #8 del mundo para 2050. Apenas detrás de Brasil y Alemania.
Gracias a nuestra envidiable ubicación geopolítica y económica, logramos 12 tratados de libre comercio con 49 países. Hemos construido 117 puertos, casi 17 mil kilómetros de vías férreas, 379 mil kilómetros de carreteras y 58 aeropuertos. Definitivamente vamos por buen camino, lo que me preocupa es la velocidad con la que avanzamos. Parece que nos tomamos muy en serio lo que nos dijo aquel arriero de que no hay que llegar primero mientras sepamos llegar.
¿Por qué nos tenemos que conformar con octavos lugares? ¿Cuántas veces hemos ido a una ciudad a preguntar por el octavo mejor restaurante para ir a comer? ¿O al quinto mejor? ¿O al segundo? Nunca. Siempre queremos ir al mejor lugar. No hay más. Los jóvenes queremos lo mismo para México y no podemos esperar hasta 2050.
Tenemos que acelerar el paso y corregir aquello que nos ha frenado. Basta ya del “ahorita, ahorita”. Esto era para ayer.
A principios de año, el World Economic Forum publicó un artículo donde se destacaba que México es el país en el que más horas se trabaja. Con 2,255 horas de trabajo al año por persona, trabajamos 892 horas más que Alemania, que es el país que menos horas trabaja.

¡Eso equivale a 112 días más por persona!

Sin embargo, Alemania logra mantener altos niveles de productividad. De hecho, se informa que el trabajador alemán promedio es un 27% más productivo que su equivalente británico.
Pero, ¿qué es lo que hace que Alemania pueda trabajar tan poco y ser tan efectivo, a diferencia de México?
Es verdad que hay factores históricos poco favorables de dominación y conquista. Pero no podemos seguir usando eso como excusa para victimizarnos y resignarnos. Alemania también ha tenido períodos difíciles y se ha podido reponer.
En mi experiencia trabajando en ambos países me di cuenta de que hay dos principales razones que generan esta diferencia:

  1. La actitud hacia el trabajo por el temor al desempleo.
  2. El sistema educativo y la formación profesional.

Acerca de la actitud hacia el trabajo
En un estudio que estamos realizando Lite Organization y Collective Academy, nos hemos dado cuenta, hasta ahora, de que la mayoría de la gente no sabe qué es lo que se espera de ellos realmente. Y entre los equipos que sí lo saben, muchas veces lo que falla es el seguimiento.
Definir cuáles son los resultados que esperan de un equipo, comunicárselos y darle seguimiento a su cumplimiento, son labores difíciles. Por lo tanto, los directivos muchas veces prefieren valorar el tiempo que los empleados pasan en la oficina, que es más fácil de medir. La famosa “hora nalga”.
El miedo a ser despedido y las implicaciones socioeconómicas que esto representa, fomentan que los empleados acepten esta condición y trabajen durante más horas. Esto los hace menos efectivos, lo cual los obliga a trabajar más.

Acerca de la formación profesional
¡Ser el #16 en ranking mundial de universidades es inaceptable! Necesitamos fomentar nuevos modelos educativos y regresar al país a las mentes más brillantes.

Más del 13% de los posgraduados mexicanos se ha marchado a Estados Unidos, atraídos por buenos salarios y mejores condiciones de trabajo.”

- El País

El capital intelectual es una de las formas de producción que más plusvalía genera y si queremos ser un país primermundista, tenemos que ser el número uno en este ámbito.
Pienso que es momento de actualizar a la fuerza laboral activa y fortalecer las bases que se le brindan a los jóvenes estudiantes. Para lograr esto, las empresas deben invertir en el desarrollo de los trabajadores y el gobierno debe apoyar iniciativas que suban el estándar de la formación académica en el país.
Por fortuna, son cada vez más las empresas que se preocupan por el desarrollo de sus colaboradores y están dispuestas a invertir en su aprendizaje. Esto no sólo fomenta la innovación e incrementa la productividad, sino que también aporta a la satisfacción laboral de cada uno de los colaboradores. Así, la percepción de crecimiento, que es uno de los principales motivadores profesionales, apoya a que la actitud hacia el trabajo sea más positiva.
Referencias:

México, País de claroscuros y grandes oportunidades from Juan Saldívar v. Wuthenau


Miguel Verduzco es estudiante del Master en Business & Technology de Collective Academy. Después de trabajar cuatro años en el sector Automotriz en Alemania, México y Hungría fundó Lite Organization. Desde hace un año ayudan a empresas a crear mejores resultados, mejorando las relaciones internas y alineando los objetivos de la organización.


A finales del año pasado (2017) tuve la oportunidad de asistir al evento de Forbes: Game Changers gracias a CollectiveAcademy. En él se discutieron las tendencias tecnológicas que están cambiando el mundo de los negocios y la importancia de fomentar y apoyar una cultura de innovación en las empresas para no volverse obsoletas.
Entre los expositores estuvieron: Greg Horowitt, encargado de culturas de innovación de la Universidad de Stanford, con la temática “Culturas de Innovación, The RainForest” y David Roberts, quien es considerado uno de los principales expertos mundiales en innovación disruptiva y tecnología exponencial. Él ofreció el keynote “Tecnologías exponenciales que cambiarán el futuro”.

Además, se llevó a cabo el panel titulado “El estatus de la innovación en México”, moderado por José Antonio Torres, fundador y Presidente Ejecutivo de The Edge Group. Entre otras cosas, se discutió cómo fomentar una cultura de innovación en México y cómo atraer y retener el talento milenial.
Se propusieron diferentes aspectos sobre la creación de una cultura de innovación basados en un estudio realizado por The Edge. El resultado mostraba que los dos aspectos que representan el mayor reto para las organizaciones en México son:

  1. La falta de líderes como modelos a seguir.
  2. La falta de prácticas para fomentar la innovación dentro de las empresas.

Se concluyó reflexionando sobre la forma en la que se podría cambiar el resultado del análisis y tener mejores modelos a seguir que inspiren a la juventud a tener iniciativas innovadoras.

"Hay una recompensa para los que se arriesgan." 
- David Roberts 

En una de las pausas entre presentaciones vi a Horowitt solo en el pasillo y dudé un poco si acercarme a hablar con él. Pero tomé este último consejo de David Roberts y me arriesgué. Escribí este post para compartir los principales aprendizajes que me llevé de la plática.
Como no sabía cómo acercarme para tener su atención y sacar el mayor provecho posible de una conversación con él, decidí preguntarle si “daba clases en Stanford”.
Me arrepentí inmediatamente por escoger esa pregunta para abordarlo y pensé que la conversación iba a terminar bastante rápido. Pero Horowitt sonrió, me dio la mano y me dijo: sí, soy Greg. Y así fue como empezamos a hablar.

“No teman del no saber y aprendan a ser niños.”
- Greg Horowitt

Además de los consejos y las ideas de Greg, algo que me quedará grabado fue el trato que tuvo con un joven desconocido que nerviosamente se acercó a preguntarle si “daba clases en Stanford”.
Desde el principio y hasta el final de nuestra conversación Greg mostró mucho interés en mis preguntas y lo que tenía que decir, así como respeto y admiración por las ideas que le planteé. Y después de escucharme, me brindó (con gran humildad) varios consejos muy honestos con el afán de aportar a lo que le decía:

El statu quo muchas veces se pretende proteger por el vocabulario de los negocios: los directores dirigen, los presidentes presiden y los gerentes gestionan. Pero todas esas actividades están agregando mucho menos valor de lo que solían. Impiden la innovación y ahogan la creatividad en la constante búsqueda del orden.

“El activo más importante que necesitamos para la innovación es la imaginación, mucho más importante que el conocimiento.
- Greg Horowitt

Esto no quiere decir que no se necesite también de algunas estructuras para darle seguimiento a los proyectos y cumplir con los objetivos establecidos. Pero las estructuras pueden aparecer y desaparecer de acuerdo a las necesidades de cada organización. Las organizaciones basadas en proyectos y libres de títulos fijos (donde el miembro del equipo de ayer es el líder del equipo de hoy) ayudan a los integrantes a ser mejores líderes y mejores seguidores, ya que los vuelve más empáticos el uno con el otro. Estas organizaciones desarrollan la flexibilidad y la agilidad que otras empresas anhelan.

“Los métodos tradicionales de hacer negocios ya no funcionan.”
- David Roberts

El modo de gestión jerárquica ya no es adecuado para los desafíos de la economía moderna. Las estructuras del ayer se basaban en el ego y en la búsqueda de poder individual. Hoy el ego para fomentar la vanidad muchas veces no permite a las organizaciones lograr sus metas.

Por eso, Greg Horowitt propone olvidar los "EGO-Sistemas" y fomentar la organización más como un "ECO-Sistema."

Al final, me dio seis consejos básicos para lograr fomentar esta forma de organización e iniciar un cambio cultural de compañerismo y aprendizaje en las organizaciones y en México:

  1. Find your tribe: siempre hay otras personas a quienes les va a apasionar tu causa. Encuéntralos y trabajen en equipo. Hay un proverbio africano que dice: “Si quieres llegar rápido, ve solo, pero si quieres llegar lejos, ve en manada.”
  2. Don’t boil the ocean: empecemos paso a paso, no tenemos que cambiar todas las prácticas que no funcionan al mismo tiempo. Así solo nos vamos a abrumar y es más probable que desertemos.
  3. Define a set of new rules: lo que nos trajo a donde estamos hoy, no nos va a llevar a donde queremos llegar mañana. Debemos cuestionar lo que está establecido y proponer una nueva manera de hacer las cosas.
  4. Give back: la generosidad nos ayuda a desarrollar empatía y ésta es fundamental para innovar, ya que nos da la sensibilidad necesaria para identificar los problemas que realmente importan.
  5. Celebrate success stories: Enaltezcamos a quienes están haciendo bien las cosas, así podemos fomentar que otros quieran hacer lo mismo.
  6. Involve media and journalists: Difundamos el mensaje de lo que queremos lograr. Así podemos sumar a otros a nuestras causas.

“Muchas personas han pasado mucho tiempo de su vida en el mapa, en el centro sabiendo lo que es predecible y probable. Los empresarios están fuera del mapa y es donde todas las cosas buenas suceden.”
- Greg Horowitt

El evento y la plática con Greg me dejaron muy emocionado y viendo muchas posibilidades de lo que podemos lograr como comunidad (Ya sea como comunidad #Collective, dentro de nuestras empresas, o nuestros círculos sociales). Veo que los problemas que se plantearon, se reflejan mucho en las organizaciones con las que trabajamos en Lite Organization y creo que es nuestra labor fomentar estas mentalidades para crear los espacios de trabajo que nosotros como millenials estamos buscando para nosotros.

“En el siglo XXI los empresarios deben dominar otras industrias que a lo mejor no tendrá relación con la suya.”
- David Roberts

 

Este artículo se publicó originalmente en LinkedIn Pulse.
Israel como país, es relativamente joven y pequeño. Con apenas unos 70 años desde su fundación al término de la segunda guerra mundial, cuenta con una población de 8.5 millones de habitantes, y su extensión geográfica es aproximadamente la mitad que la del estado de Baja California Sur.
La situación de Israel no es fácil. No cuenta con recursos naturales y está ubicado en un territorio semidesértico. Desde su fundación ha estado en guerra o bajo constante amenaza de guerra, y su mercado doméstico no es grande. Sin embargo, a pesar de situarse en medio de una de las zonas más conflictivas del mundo, Israel es hoy uno de los países más prósperos de la región, y junto con Silicon Valley, se posiciona como uno de los centros de innovación y desarrollo más importantes del mundo.
El éxito de Israel parte de su espíritu emprendedor; su economía está basada en el desarrollo de capital humano, la innovación y el conocimiento. Es el país con la mayor inversión per cápita en investigación y desarrollo; cinco de sus nueve universidades están dentro de las mejores del mundo, y el 60% de la población cuenta con un grado de educación superior.
La inversión en talento ha hecho que más de 500 aceleradoras y fondos de inversión se hayan instalado en Israel para impulsar el emprendimiento. Israel es el país que genera el mayor número de empresas nuevas cada año, por lo que hoy se le conoce como el “Startup Nation”.
¿Cómo logró Israel esta transformación en tan poco tiempo? ¿Cómo pasó de ser un país desértico y en guerra a un estado próspero y posicionado como centro global de innovación?
A principios de mayo fui invitado a la TAU Innovation Conference 2017organizada por STARTAU, el centro de emprendimiento de la Universidad de Tel Aviv. Junto con el equipo directivo del IPETH, un equipo conformado por emprendedores Endeavor, viajamos a Israel para discutir sobre los desafíos futuros del sector salud y educación. Durante una semana, participamos como parte del jurado en el Global Startup Challenge, y asistimos a una serie de paneles, grupos de discusión y seminarios de innovación. De esta manera, tuvimos la oportunidad de convivir con empresarios, inversionistas, académicos, y funcionarios de gobierno, para discutir sobre los factores que contribuyeron a la transformación y al éxito de Israel.
En general, todos coinciden en los principales factores que transformaron al país. Les comparto el aprendizaje que resumí en 4 temas: incertidumbre, talento, agricultura, y miedo al fracaso.

1)     Incertidumbre

No saber lo que va a suceder el día de mañana es algo que nos preocupa a todos. Como hemos visto en los últimos meses con el precio del dólar y la bolsa de valores, los mercados son más volátiles en tiempos de incertidumbre y la inversión disminuye si las empresas no ven un futuro estable. En general, no queremos vivir con incertidumbre. Preferimos la certeza de saber lo que va a ocurrir el día siguiente.
Sin embargo, en Israel, la incertidumbre es normalidad. Las constantes amenazas de guerra hacen que los israelitas crezcan en un entorno de inseguridad y naturalmente se preparan para ella. El ejército juega un papel muy importante en este proceso de preparación. Todos los jóvenes hacen el servicio militar al cumplir 18 años, dos años para las mujeres y tres años para los hombres. En el entrenamiento, los soldados desconocen los retos que tendrán que afrontar cada día. Pero saben que algo va a suceder, y tienen que estar preparados para cualquier escenario. Se entrenan física y mentalmente para las distintas situaciones que podrían surgir. Ante algún evento inesperado, la preparación les permite responder de manera efectiva.
El servicio militar juega un rol importante en la formación de los jóvenes. En el servicio se empieza a formar el espíritu emprendedor que caracteriza a los israelitas. También contribuye a la cohesión social característica de su pueblo, ya que, durante tres años, todos los Israelitas conviven entre ellos independientemente de su nivel socioeconómico. La preparación física y mental es importante, pero en estos tres años de servicio militar, los jóvenes desarrollan su capacidad de liderazgo, responsabilidad, comunicación, trabajo en equipo, trabajo bajo presión, disciplina y resiliencia. Muchos coinciden en que el ejército produce líderes orientados a resultados y resolución de problemas. Estas aptitudes son necesarias para la operación efectiva del ejército, pero en otro contexto, son competencias esenciales para cualquier emprendimiento.
En otras palabras, los israelitas están estableciendo una ventaja competitiva. Hoy en día, los cambios son constantes y cada vez más frecuentes. Por lo tanto, el entorno futuro es cada vez más incierto. Los israelitas están preparados para la incertidumbre, y su capacidad de adaptación les permitirá ajustarse y responder más rápido a los cambios en el mercado que las personas, empresas o países que no tengan el capital humano para adaptarse. Las empresas que no puedan responder oportunamente y adecuarse al cambio desaparecerán.

2)     Talento

En Israel, el capital humano es uno de los pilares del crecimiento económico y el desarrollo de talento es una política de Estado. La educación superior es altamente valorada y las mejores universidades son públicas. Es el país con más ingenieros per cápita a nivel mundial y 60% de las personas tienen un grado de educación superior, lo que ubica al país en el 4to lugar de los países de la OCDE.
La Autoridad de Desarrollo de Jerusalén tiene como misión atraer y retener a los mejores estudiantes. ¿Cómo lo hacen? Les ofrecen las mejores universidades del mundo, la mejor experiencia educativa, y la promesa de llevar a la realidad sus ideas. Los estudiantes tienen un ecosistema de emprendimiento a su disposición. Los jóvenes tienen acceso a fondos de inversión, aceleradoras e incentivos del gobierno para desarrollar sus ideas desde la universidad.
La aceleradora Siftech, como ejemplo, tiene un fondo de inversión – Fresh Fund – que opera de manera singular. El fondo es administrado por estudiantes y para estudiantes. Los mejores alumnos seleccionan los proyectos de otros estudiantes para invertir capital semilla. La lógica de este modelo es que los estudiantes están en el lugar donde se generan las ideas y el conocimiento. Son además “early adopters” de nuevas tecnologías. Por lo que son las personas ideales para identificar anticipadamente, seleccionar y promover los mejores proyectos. Talento genera talento.
En la educación superior sobresale un dato interesante, la edad promedio de los estudiantes es superior a la de los demás países. Los estudiantes israelitas terminan la universidad a los 27 años de edad, comparado con los 23 años en otros países. Esto se explica por dos factores, primero, los tres años que los jóvenes pasan en el servicio militar, y segundo, la mayoría de los jóvenes viajan un año por el mundo al concluir el servicio. Durante su paso por el ejército, los estudiantes desarrollan habilidades para la vida. El año que viajan les sirve para formarse una visión global, aprenden de otras culturas, de otros mercados, de otras necesidades, de lo que se hace bien y lo que se hace mal en otros países. Esta visión les servirá más adelante en su actividad como emprendedores.
Entrar a la universidad con mayor edad no es una desventaja, al contrario, es una oportunidad. Los jóvenes tienen una perspectiva más amplia de lo que quieren hacer cuando eligen una profesión, y estudian con un objetivo en mente. En esta etapa, el espíritu emprendedor que empezó a formarse desde el servicio militar, se fortalece con los conocimientos técnicos de la educación superior.
En el servicio militar y la universidad, los jóvenes desarrollan la capacidad de pensar de forma abstracta para enfrentar problemas nunca antes vistos, y de superarlos de manera lógica, analítica, inteligente y original. Esta es una habilidad altamente valorada por las empresas de alta tecnología.
No es coincidencia que las principales compañías tengan oficinas en Israel. Empresas de alta tecnología como Intel, Microsoft, IBM, Cisco y Motorola y más de 300 otras empresas internacionales han establecido sus centros de investigación y desarrollo en ese país. Israel es un líder mundial en desarrollo de tecnologías de vanguardia en software y comunicaciones, lo que ha derivado en una serie de adquisiciones de empresas tecnológicas israelíes por empresas como Google, IBM y Facebook. Las adquisiciones más relevantes abarcan varios sectores de alta tecnología, incluyendo software, aplicaciones móviles, fintech, y ciberseguridad entre otros.
Las empresas encuentran en Israel el talento necesario para crear la tecnología del futuro. El talento genera talento y no hay mejor ejemplo de lo anterior que el de Helena Wexler. Helena, una graduada en arquitectura de diseño, ganó un premio de la NASA por su propuesta para construir vivienda en Marte con una impresora 3D. Ahora ella es la directora de JNEXT, un programa para fomentar el emprendimiento de los estudiantes. Pronto asistirá a la Universidad de Harvard con el fin de continuar sus estudios, pero no me queda duda que regresará a Israel a liderar el campo de investigación que ella decida.
Las aceleradoras y los fondos de inversión se fijan mucho en el talento. MindCET es la aceleradora que lidera el campo de la innovación y la tecnología en el país. Su enfoque está en crear emprendedores, y para ellos, lo más importante son las personas que integran el equipo de trabajo. En la mayoría de los proyectos, el producto final difiere del concepto original. Esto es porque el equipo de trabajo va adquiriendo experiencia en el proceso, se equivoca, aprende, y mejora el producto de manera progresiva. Es la capacidad del equipo de trabajo lo que les permite aprender del proceso y hacer los ajustes necesarios de manera oportuna. El talento encontrará soluciones a cada problema que se encuentre, y entregará un producto que satisfaga las necesidades del mercado.
Otro ejemplo es el de la Autoridad de Innovación de Israel. Ellos tienen como objetivo fomentar y desarrollar los recursos de innovación de Israel, creando y fortaleciendo la infraestructura para apoyar a toda la industria del conocimiento. Su éxito reside en la simplicidad de su enfoque, ser el puente entre las ideas y el mercado. La actividad de innovación recae en los emprendedores. Con este enfoque, invierten en empresas desde etapas muy tempranas, e integran en el ecosistema a aceleradoras y fondos de inversión para impulsar a las empresas hasta llegar a una escala global.
En resumen, las organizaciones y los incentivos están alineados para desarrollar el talento necesario para el emprendimiento. Desde el ejército hasta los fondos de inversión, pasando por las universidades y las aceleradoras, Israel se distingue por la formación de capital humano.

3)     Agricultura

Israel se distinguió en la década de los 60s por transformar su paisaje, de una región semidesértica a campos verdes y altamente productivos. El riego por goteo permitió hacer un uso racional del agua - el recurso más importante y más escaso en la región - para convertir su suelo árido en uno fértil para los cultivos. El gobierno se enfocó en transformar el suelo para que las semillas encontraran una tierra fértil donde crecer. Para fomentar el emprendimiento, utilizaron el mismo enfoque.
Crear empresas no es un problema de reingeniería, procesos o logística. El desafío se asemeja más a un problema de agricultura. Al igual que una semilla, el emprendimiento florece de manera natural si las condiciones son adecuadas. Cuando hay un problema y un mercado, hay una oportunidad para el emprendimiento, pero que la empresa florezca depende de las condiciones del suelo. Por lo anterior, el gobierno no se dedicó a crear empresas, se enfocó a establecer las condiciones adecuadas para favorecer el crecimiento natural del emprendimiento y facilitar un terreno fértil donde las empresas puedan prosperar.
La educación y el servicio militar son sólo dos aspectos del ecosistema en el que se enfocó el gobierno. Además de invertir en talento, el gobierno estableció incentivos para fomentar la inversión extranjera directa y la innovación. Implementó subsidios y beneficios fiscales con el propósito de impulsar las empresas de alta tecnología ya las actividades de investigación y desarrollo.
En los 90’s, el gobierno lanzó el proyecto Yozma (iniciativa en español) para impulsar el emprendimiento. Asignó 100 millones de dólares para crear 10 fondos de capital de riesgo en un esquema de coinversión con el sector privado. El éxito de estos fondos semilla residió en la alineación de incentivos entre los participantes mediante sus reglas de operación. En estas, el gobierno destinó hasta 85% de los recursos a fondo perdido, pero requería que el emprendedor ponga el resto o lo consiga de otros inversionistas. Con esto, aseguraron una alineación con el mercado y la evaluación objetiva de un tercero independiente.
A 20 años de lanzar la iniciativa, hoy hay más de 500 fondos de inversión y aceleradoras en el país.
Hoy en día, Israel es considerado uno de los países más avanzados de Oriente Medio en el desarrollo económico e industrial. En las dos últimas décadas, la economía israelí cambió radicalmente, alejándose de las industrias agrícolas para convertirse en una potencia de alta tecnología. La industria representa ahora alrededor del 27% del PIB, comparado con un 3% atribuido a la agricultura.
Con una población pequeña y un área geográfica limitada, el gobierno alienta a las empresas israelíes a desarrollar las industrias de alta tecnología para el mercado internacional. Hoy, Israel destaca en tecnologías de la información y la comunicación, la seguridad interior, la industria aeroespacial, la electrónica y las tecnologías ambientales.

4)     Miedo al Fracaso

Carol Dweck, investigadora de la Universidad de Stanford, estudió la causa por la que algunas personas son capaces de entender y superar nuevos desafíos, mientras que otros fracasan en el intento. En su investigación de más de 3 décadas, encontró que había dos maneras de enfrentar la vida, y que cada manera lleva a comportamientos que separan a las personas exitosas de los demás.
Los dos hábitos se conocen como la "mentalidad fija" y la "mentalidad de crecimiento":
Una "mentalidad fija" supone que nuestra inteligencia y capacidad creativa son estáticos y que no los podemos cambiar de manera significativa. Las personas con esta mentalidad piensan que el éxito es la afirmación de esa inteligencia. Luchar por el éxito y evitar el fracaso a toda costa se convierte en una forma de mantener el sentido de ser inteligente o experto.
Una "mentalidad de crecimiento", por otro lado, se nutre del desafío y ve el fracaso no como evidencia de la falta de inteligencia, sino como una vía para crecer y ampliar nuestras capacidades.
La investigación de Dweck encontró que estos dos enfoques son la causa que separa a las personas que sobresalen de aquellas que no. Los que tienen una mentalidad de crecimiento, aceptan los desafíos y ven al fracaso como una oportunidad de aprender para mejorar. Este tipo de mentalidad conduce al éxito.
En Israel utilizan el término “Fracaso Constructivo”. No le temen al fracaso, y éste es considerado como parte del aprendizaje y de mejora continua. El miedo es la principal causa de parálisis, es un mecanismo de defensa en la medida en que nos protege de los riesgos; pero resulta contraproducente si genera parálisis. Fracasar está implícito en el proceso de innovar. Innovar es cuestionar el status quo, experimentar, equivocarse, aprender, perseverar y mejorar. Por lo que, si queremos innovar, tenemos que perder el miedo al fracaso.
Establecer una cultura donde no se tiene miedo es algo que se construye a lo largo del tiempo. Se debe establecer un entorno de confianza en donde no se castigue al innovador si los resultados no son los esperados, porque de lo contrario, inhibimos la creación. Esta cultura de confianza es evidente en el servicio militar.
En el ejército, los soldados pueden cuestionar a sus comandantes sin ser reprimidos por hacerlo. Incluso, es una conducta que se estimula entre los soldados porque genera varios beneficios, entre ellos, una mejor autoridad. Mediante esta política, la autoridad se obliga a tomar decisiones que se sostengan ante diversos cuestionamientos, y debe tener el liderazgo necesario para ejecutar adecuadamente las decisiones.
Esta conducta se observa más adelante. Los jóvenes emprendedores cuestionan continuamente el status quo; Siempre buscan una mejor manera de hacer las cosas; No tienen miedo a cuestionar, no tienen miedo a intentar, no tienen miedo a fracasar. En otras palabras, no le tienen miedo a la innovación. Para lograr un cambio, hay que perder el miedo.
Alejandro Cuervo, emprendedor Endeavor y fundador del IPETH, propone un ejercicio mental. A cada decisión que tomamos, pregúntate tres veces por qué lo hacemos. Él argumenta que en México no estamos acostumbrados a cuestionar, ni a que nos cuestionen, y que la mayoría de las decisiones no se sostienen si nos preguntamos tres veces por que lo hacemos. En principio, no cuestionamos por miedo, porque así nos enseñaron desde la escuela. Desafortunadamente, al no exigirnos, al no cuestionarnos, nuestras decisiones son más pobres. Si queremos innovar, tenemos que empezar a cuestionarnos todo.
En Israel se ha conformado una cultura donde el fracaso se entiende como parte de la experiencia empresarial y del desarrollo profesional de las personas. Si se tomó una decisión pensada, pero el resultado no fue el esperado, el fracaso se considera como parte del proceso de aprendizaje y de mejora continua. Esta cultura de no tener miedo al fracaso, o de no castigar el fracaso, es lo que ha impulsado a miles de jóvenes a cuestionase la manera tradicional de hace las cosas, a asumir riesgos, tomar decisiones y a emprender; con la gran virtud de que son jóvenes talentosos y preparados para hacer frente a los desafíos que se encuentren.
 

Conclusiones

No hay innovación sin fracasar en el camino. Por lo que tenemos que perder el miedo, apostarle al talento, abrazar la incertidumbre y desarrollar una visión global.
Si estamos convencidos de lo anterior, podemos ser exitosos en cualquier objetivo que nos pongamos si utilizamos, de manera inteligente y sistémica, un proceso de mejora continua. Debemos enfocarnos más en el proceso que en el producto final. El producto será resultado del proceso.
Edison es famoso no sólo por sus invenciones sino también por su actitud ante el fracaso. En su mente, el fracaso era simplemente otro escalón en el camino hacia el éxito. Edison fracasó casi 10 mil veces antes de encontrar el filamento adecuado para el foco incandescente. A diferencia de la persona promedio, él no se dio por vencido. Cuando le peguntaron porque persistía ante todos los fracasos, Edison respondió que no eran fracasos, que había descubierto 9,999 maneras de no hacerlo. Una actitud positiva, o la “mentalidad de crecimiento”, es lo que hace la diferencia.
A veces, los objetivos parecen inalcanzables, pero los podemos lograr si tenemos el enfoque correcto. Hasta la década de los 60s, se consideraba que correr los 100 metros en menos de 10 segundos era imposible. Los límites físicos del cuerpo humano impedían romper esta barrera. Jim Hines finalmente lo logró en 1968. Para hacerlo, cambió su manera de enfrentar el problema. No se propuso romper la barrera de los 10 segundos, simplemente se planteó reducir su tiempo en 14 centésimas de segundo, algo mucho más fácil de lograr. Con este enfoque, fue haciendo pequeños cambios a distintos aspectos de su carrera, mejorando el arranque, su zancada, y finalmente el cierre. Este cambio de enfoque hizo posible algo que parecía imposible de alcanzar.
De todo lo anterior, estoy convencido que la responsabilidad del éxito está en nosotros mismos. Debemos visualizar el futuro que queremos y no hay pretexto para no alcanzarlo. ¡No asumas nada, cuestiona todo! Todos los aspectos de nuestra vida son mejorables. Plantéate un objetivo, un sueño, y persíguelo con pasión.



 
Agustín Paulin es mentor de Learning How to Learn en Collective Academy. Además, es CEO de GemIIni Mexico, miembro del Consejo Consultivo de Laudex y miembro del Consejo de Administración del IPETH.
 

Nicolás Guerrero y Sebastián García-López son co-fundadores de Nomad Republic  y alumnos del Master en Negocios y Tecnología de Collective Academy. Su misión es generar un cambio en la manera de viajar de los jóvenes a nivel mundial, creando conciencia del tesoro que es la diversidad natural y cultural del mundo, e inspirar a la preservación y comprensión del mismo. Buscan ser la conexión más importante entre viajeros y proyectos de voluntariado en México y el mundo. Su historia inspira a sus compañeros y mentores en la maestría cada día y es por eso que hoy decidimos compartirla.


Uno nunca sabe cuándo la vida te va a llevar por el camino de ser emprendedor y menos con uno de tus mejores amigos. Nosotros nos conocimos en el colegio hace más de 20 años. Todos los veranos acampábamos en Guerrero junto con nuestras familias y amigos, y fué ahí donde por primera vez fuimos testigos de la marginación que existía en México. La pobreza era extrema; muchas familias no tenían casa y hasta los más afortunados vivían en condiciones precarias. No podíamos quedarnos con los brazos cruzados.
Hubo un año que decidimos hacer algo y junto con nuestras familias unimos esfuerzos para conseguir fondos y construir 200 casas en nueve comunidades cercanas. El único problema era quién las iba a construir. Lo que comenzó como una solución temporal se convirtió en diez fines de semana memorables con nuestros cuates trabajando junto con la comunidad durante el día y nos divirtiéndonos por la tarde. Fue así como en nuestro último año de prepa descubrimos una nueva forma de “viajar” ayudando a los demás.

Nuestro primer pitch


Comenzamos a planear un viaje de graduación con nuestros amigos y buscando opciones de voluntariado encontramos a Real Gap, una agencia inglesa. El plan era visitar Asia, Australia y África trabajando en distintos proyectos; sin embargo, nuestros papás querían saber el valor que el viaje nos iba a aportar. Decidimos preparar una cena con presentación en casa de Nico y los convencimos; sin darnos cuenta en ese entonces vendimos el primer viaje de NOMAD a nuestros padres.
En Tailandia jugamos con niños de un orfanato y aunque era muy divertido el impacto real era nulo. En Australia trabajamos cortando lantana, una planta invasora que termina acabando con las especies nativas si no se elimina. Ambas experiencias fueron interesantes pero no transformacionales y la gente iba por tomarse fotos con niños sin tener un impacto a largo plazo. Fue ahí donde se nos ocurrió hacer “Get Nomad” para promover voluntariados de mucho mayor impacto en México. Nuestro tren de pensamiento fue: si nuestro viaje tenía los días contados, ¿por qué no crear un proyecto y que el viaje nunca termine?

Desde el sótano

Regresamos del viaje y comenzó la carrera por lo que Get Nomad pasó a segundo plano por casi dos años. En algún punto, al darnos cuenta que la carrera no nos estaba cambiando la vida como nuestro voluntariado, decidimos retomar el proyecto. Aplicamos a la incubadora de la Universidad Iberoamericana. Uno de nuestros amigos nos sugirió cambiar el nombre a NOMAD Republic, para transmitir la idea de un país sin territorio, y nos encantó la idea. Para diciembre de 2012 NOMAD Republic era una empresa constituida, y en enero de 2013 empezamos operaciones desde el sótano de la empresa del papá de Nico. En nuestro primer año vendimos nueve viajes de Real Gap, nada mal pero sabiendo que había mucho por hacer.

Nuestro segundo viaje

Con el dinero que ganamos ese primer año decidimos irnos un mes y medio por el sureste de México con la visión de crear un producto que fuera una mejor experiencia y con mucho más impacto. Nos reunimos con ONGs y productores de café en Chiapas y recorrimos la Riviera Maya. Con lo aprendido, negociamos que Real Gap abriera México como destino con un viaje de 28 días, “The Mayan Experience”. Al primero se registraron seis personas y aunque perdimos dinero y no fue un proyecto 100% comunitario, la experiencia fue tal que dos clientas se tatuaron el logo de NOMAD Republic y la bandera de México. Algo estábamos haciendo bien y esa fue la señal que necesitábamos para sentimos listos de construir un negocio grande.

Una historia irrazonable

En diciembre de 2014 fuimos aceptados a Unreasonable México, un proyecto que nos presentó a distintos mentores y a Ricardo, nuestro primer inversionista quien entró a ayudarnos a poner orden y estructura a la empresa. Por esas fechas, Nico se dio cuenta de que no estaba aprendiendo mucho en la universidad y estaba faltando a clases por los viajes y proyectos de la empresa, así que decidió poner la carrera en pausa y dedicarse a NOMAD de tiempo completo.
Fue así que en enero 2015 abrimos nuestra primera oficina con cinco personas: Sebastián, Nicolás, Enrique, Alexis y Rodrigo. Empezamos a ofrecer los viajes que siempre habíamos querido: con impacto a largo plazo y curados por nosotros – con la certeza de que algún integrante del equipo lo había hecho. Seleccionamos con quince ONGs, tres en México y doce en el extranjero, y logramos generar proyectos con un impacto real y duradero.
En 2015 seguimos creciendo en número de viajes y ventas. Nico entró a una  universidad, online pero por segunda vez, sentía que no aprendía nada y que sólo contestaba exámenes de opción múltiple. A finales del año tuvimos nuestro segundo parteaguas: Mundo Joven, una empresa de viajes, escuchó nuestro proyecto y decidió invertir en nosotros. Con esto logramos mejorar nuestras operaciones, logrando en 2016 un crecimiento del 70% en ventas individuales vs. el año anterior, y la contratación de una Directora General.

Un Nomad colectivo


El contratar a la Directora General nos permitió enfocarnos menos en procesos operativos y más en procesos estratégicos y fue el momento justo para entrar a la maestría de Collective Academy.
Dado que nuestra única escuela profesional había sido Nomad, Collective nos ha dado los conceptos teóricos y herramientas prácticas que nos faltaban para llevar a Nomad al siguiente nivel.
Nico en específico, encontró el modelo perfecto para desarrollar habilidades interpersonales y entender el mundo de los negocios y la tecnología; algo que había intentado hacer en la Ibero y en la UTEL. Además que por primera vez en nuestras vidas, está fue nuestra decisión de estudiar sin que nadie nos obligará a hacerlo.
Hoy en día ya hay un Nomad antes y después de Collective, porque el acceso a la comunidad de mentores y compañeros nos está abriendo los ojos a nuevos inversionistas, oportunidades de negocio y de talento.
Queda mucho por escribir sobre la historia de Nomad, pero hoy estamos seguros que será una historia mucho más divertida e interesante gracias a las herramientas, los mentores y las experiencias de Collective Academy.


Nicolás Guerrero y Sebastián García López son cofundadores de NOMAD Republic y alumnos de la Generación Alpha de Collective Academy.

These are the updates from our project to support refugees and migrants.
I personally apologise for the delay. I travelled to Colombia to understand the challenges of the peace process and reintegration of guerrilla soldiers. More on that in a few moments.

All right. These are our updates:

I. US+México

We found a sustainability model in the creation of a Media Company. Its purpose is to help Hispanics learn how to start and grow their businesses, by democratizing the access to entrepreneurship and business knowledge.
We are starting raise seed capital. If you are interested in learning more, please contact us.

II. Colombia

FARC
Next week I'll be meeting with a dozen FARC (Colombian Guerrilla members) in order to better understand their aspirations and needs.
ACR
For the past two weeks, I've been holding exploratory conversations with the Colombian Agency for Reintegration. The ACR is ascribed to the Presidency of the Republic of Colombia, in charge of coordinating, advising and executing - in partnership with other public and private entities - the Reintegration Route of demobilised people of organised illegal armed groups.
Adapting the program
Colombia represents a challenge for us. The vast majority of people we need to reintegrate (Guerrilla Army) lack of the education background migrants have in the US and MX, or Syria refugees in Europe.
We found a great solution to adapt the program, by —instead of directly training Guerilla Fighters how to start a business— focusing on training aspiring social entrepreneurs. The training purpose will be to reduce the risk of starting a business and design it in a way that we can provide 50,000 jobs in the next 15 years.
Our experience with company building (with Connovo in Mexico and Polymath Ventures in Colombia) will be an essential asset.

III. France

The initiative has also been selected as a finalist for "Bridge to Paris".
It is a program sponsored by the Entrepreneur Institute, the Franco-Mexican Chamber of Commerce and Industry and the Mexico-France Council on Entrepreneurship and Innovation.
If selected, we would gain the assistance of French Government to scale our program in Europe where we will focus on teaching Entrepreneurship to Refugees. This would be a seamless adaptation of the program develop for Migrants and Returnees in US-Mexico.

IV. Call to Action

Our current focus in raising the seed capital to fund the Media Company in US+México.
If you are interested in learning more about this new company or might know someone interested in investing in the future of Hispanic education and entrepreneurship, let us know.
 

Cómo aprendí sobre la importancia de la inteligencia emocional dentro de la industria de negocios y tecnología.

Tengo 25 años, hablo cuatro idiomas, estudié la primaria, secundaria y preparatoria en una de las mejores escuelas de la Ciudad de México. Antes de empezar la carrera profesional yo tenía la posibilidad de estudiar en el extranjero o en México. Al final, opté por estudiar Creación y Desarrollo de Empresas en el Tecnológico de Monterrey, ya que parecía ofrecer la combinación ideal entre mercadotecnia, finanzas, administración e ingeniería industrial.
Acabé la carrera en 2015, tras cinco años de cursar materias de relleno que sigo sin entender por qué tenía que llevar. La mayoría de mis maestros se había dedicado a la academia toda su vida con poco “trabajo en campo”, aspecto que para mí no tenía sentido en una carrera como la mía. El ser (o aspirar a ser) emprendedor requiere, forzosamente, de acciones reales puestas en práctica, cuestión que en la mayoría de los casos de mis maestros no era una realidad.
Al terminar mi carrera me quedé con un sabor agridulce. Por un lado me sentía agradecido por haber conocido a gente increíble, por haber tenido la oportunidad de estudiar — y no sólo de estudiar, sino de hacerlo en una universidad privada con enormes recursos. Pero por el otro, sentía que aún no estaba preparado para emprender. Esto, por supuesto, con sus matices. No atribuyo todo a mi experiencia (o falta de experiencias) en el ITESM; influyen mi personalidad adversa al riesgo, mi capacidad de entender que aún me faltan ciertas enseñanzas necesarias para que el miedo al fracaso no sea una manifestación tangible, sino una comprensión sobre el propio sesgo que yo me creo.
Lo que sí atribuyo a mi experiencia en el Tec de Monterrey es la falta de comprensión sobre la importancia de impartir y desarrollar soft skills. Nos guste o no, los negocios y el emprendimiento son disciplinas 100% humanas, relacionadas a nuestra experiencia en este mundo. Por lo mismo, el desarrollar las “habilidades suaves” (#válgamelatraducción) es ultra mega fundamental para potencializar la capacidad de uno y de aquéllos que nos rodean. Hago énfasis en mi histriónica expresión “ultra mega fundamental”, porque este aspecto ahora no puede ser más claro.
Antes de entrar al detalle, es importante mencionar que desde los 21 años he tenido una relación trabajo-estudio como parte de mi día a día, ya que en mi carrera trabajé desde tercer semestre.

Ahora sí, ¿Por qué entrar a Collective Academy es la mejor decisión que he tomado?

Porque dentro de la oferta académica que existe, no sólo en México, sino el mundo, son contadas las instituciones que entienden la importancia del desarrollo de habilidades emocionales — del poder que se adquiere al conocerlas y manejarlas con inteligencia racional.
El primer mes de la maestría comenzó con *Learning How to Learn *y *The Science of Everyday Thinking *como materia consecuente. Fue ahí donde pude observar y empatizar con los fundadores de mi querida Collective Academy, y entender su visión. Una visión que es proveer a la gente con el poder de entenderse a uno mismo y a los demás, es en todo el sentido de la expresión una reconexión con uno y su entorno, consciencia en su definición más clara.
Y sí, consciencia es lo que este programa despierta en mí, porque además de las materias que desarrollan las habilidades emocionales, existen las que desarrollan las habilidades técnicas: Marketing, Operaciones, Estrategia, Programación, etc., y todas (de verdad todas) son impartidas por gente que nunca había pensado en la academia como su principal área de desarrollo, sino profesionistas y lo más importante es que tienen el deseo de compartir su conocimiento y experiencia. Es aquí donde encuentro la congruencia de querer ser la mejor institución académica de negocios y tecnología.

Cuando platico con mis amigos y conocidos, así me refiero a ella: “Ésta es una maestría para los ‘rifados’. Para los que saben que quieren más de sí y la comodidad les presenta una incomodidad.”

Mi miedo inicial era la incertidumbre de no saber cómo iba a poder acomodar mi vida de tal forma que tres noches a la semana de 6pm a 10.30pm pudiera cuadrar: trabajo, estudios y vida social. Hoy ese miedo se convirtió en una fortaleza; ahora soy más organizado. Por la necesidad de tiempo, optimicé mis actividades dentro de mi trabajo, para que todo me dé los resultados exigidos. Frecuento a mis amigos en los espacios que yo decido y no sólo “por tener una vida social”.
Aún falta un semestre por recorrer, pero hoy sé que ésta es la mejor decisión que he tomado. Siempre estaré agradecido con Pato y Fernando por su enorme visión; y con todos y cada uno de mis mentores que son al día de hoy las influencias profesionales más importantes que he tenido. Lo mejor de todo es que sé que tanto para mí como para Collective, esta decisión es sólo el inicio. Gracias Collective Academy por el empoderamiento.
Jean Ausina es Director de Marketing en Dream Water, una empresas de e-commerce que vende la primer bebida que ayuda al relajamiento y al buen dormir, y alumno de la Generación Fundadora de Collective Academy.

Cómo lograr más este año

Los propósitos fallan

Es ese tiempo del año otra vez cuando hacemos propósitos para el Año Nuevo. Éste es el año que va a superar todos los años previos, nos decimos a nosotros mismos. Vamos a ser más organizados. Vamos a gastar menos y guardar más. Vamos a bajar de peso y encontrar el trabajo de nuestros sueños.
Todos tenemos las mejores intenciones al inicio del año nuevo, pero los propósitos que hacemos simplemente no funcionan. Según un estudio de Statistic Brain, sólo 8% de la gente logra sus propósitos. Hay muchas razones por las que nuestros propósitos fallan, incluyendo que creamos demasiadas metas al mismo tiempo y no las hacemos viables. Entonces, ¿por qué seguimos haciendo algo que obviamente no está funcionando?
Los propósitos para el Año Nuevo no son realistas. En vez de hacer propósitos, debemos fijar metas que sean realistas, medibles y — sobre todo — alcanzables. Hay que enfocarnos en hacer hábitos fuertes y saludables para cambiar los comportamientos que queremos romper.

Hay que crear cambios sostenibles y de largo plazo

Cuando buscas hacer un cambio de largo plazo en tu vida, hay que asegurarse de que tus metas estén bien formuladas y sean sostenibles. El propósito más popular generalmente es bajar de peso. Pero esto no es una meta sostenible si sólo vas a bajar 3 kilos y después empezar otra vez a comer mal. Hay que cambiar tu mentalidad. Debes cambiar la meta de “Voy a bajar de peso” por “Voy a ir al gimnasio cuatro veces a la semana para ser más saludable.” Esta meta no sólo es accionable sino también tiene una perspectiva positiva de largo plazo.

Por qué los hábitos son esenciales para el cambio

Durante nuestras vidas creamos un patrón de acciones y comportamientos que vienen de nuestras interacciones con el mundo y que se transforman en hábitos que nos siguen durante nuestras vidas. Algunos de éstos son hábitos buenos, pero también tenemos algunos malos. En cualquier caso, eres la suma de tus hábitos. Para garantizar un cambio a largo plazo hay que hacer hábitos que contribuyen a tu meta de largo plazo.
Creamos hábitos y patrones de comportamiento para combatir la fatiga de decisiones. Básicamente, sólo podemos manejar un cierto número de decisiones cada día antes de que nuestra fuerza de voluntad erosione. Cuando esto ocurre es más fácil caer en hábitos viejos porque es más fácil no pensar. Siempre buscamos automatizar nuestras decisiones, entonces asegúrate de estar automatizando acciones que mejorarán tu vida.

Cómo construir un hábito fuerte y saludable

1. Empieza en pequeño

La mayoría de la gente comete el error de tratar de lograr demasiadas cosas, demasiado rápido. Hay que tomar pasos pequeños y aceptar que hay que crecer lentamente. La clave para construir bases sólidas para un hábito es hacer la barra del éxito suficientemente baja para que no puedas hacer nada excepto lograrlo. Suena a pereza pero realmente funciona. Si puedes lograr tus metas al principio empezarás a construir una mentalidad positiva alrededor de esa actividad.

2. Construir sobre una base sólida 

Una vez que tienes la base en su lugar es tiempo de hacer tu hábito. ¿Puedes correr más o guardar más dinero? ¡Por supuesto! Al incrementar lentamente tu hábito verás pequeños cambios, que si bien te pueden frustrar, al final del año te sorprenderá ver lo lejos que has llegado.

3. Hazlo un experimento

No trates a tu hábito como un ajuste de todo o nada en tu vida. Diferentes métodos funcionan para distintos tipos de personas. Sólo debes enfocarte en encontrar lo que funciona para ti. Y sólo vas a lograr esto con una mente abierta. Los experimentos no dirigen a fracasos, dirigen a aprendizaje y ésta es la clave de construir un hábito fuerte.

4. Manténte responsable de ti mismo

Si quieres asegurarte de adherirte a un hábito entonces hay que mantenerse responsable. Crea un registro cada vez que realizas una acción que apoya el comportamiento nuevo. Lift es una app muy simple que te puede ayudar con esto para que no pierdas horas registrando actividades.
Mejor aún, haz pública tu responsabilidad. Si estás entrenando para un maratón entonces haz público tu horario de entrenamiento, por ejemplo con Google Docs. Compartir tu progreso con tu familia y amigos es una buena manera para mantenerte motivado y te puede incentivar a esforzarte a lograr todavía más.

5. Encontrar tus detonadores

Además de hacer nuevos hábitos, hay que romper los viejos. Para hacer esto, hay que encontrar las detonadores del comportamiento malo que quieres romper, y cambiar tu mentalidad alrededor de ellos. Por ejemplo, si quieres comer más saludable puedes cambiar tu punto de vista, de ver la comida como placer por algo que está alimentando tu cuerpo. Esto te puede ayudar a hacer una transición a comer comidas más saludables en el largo plazo.

6. No tengas miedo de fracasar

Es muy difícil cambiar un hábito malo que está profundamente arraigado en tu vida diaria. No pierdas tu motivación. Hay que trabajar mucho para lograr tus metas y tienes que tener confianza en ti mismo.

7. Enfócate

La gente piensa en demasiadas metas al principio del año y se abruma muy rápido. Por eso la proporción tan alta de gente que no logra sus propósitos. La clave del éxito es el enfoque. Elige una sola cosa que quieres cambiar en tu vida durante un año y persíguela incesantemente.


Entonces, este año en el 31 de diciembre, no pienses en grandes propósitos que nunca podrás lograr. En cambio, piensa en los hábitos que no quieres tener en tu vida y concéntrate en cambiarlos paso a paso. No te sientas obligado a crear un calendario estricto. Enfócate en ti mismo, en encontrar y construir tus propios valores y comportamientos. Y el primero de enero de 2017, en vez de pensar en lo que quieres lograr en un año, enfócate en lo que quieres lograr ahora.